Salimos apurados hacia el hospital, nuestra esposa está a punto de dar a luz mellizos, tenemos que llegar lo antes que se pueda porque no nos queremos perder el milagro de la vida!! Y en la puerta de nuestro trabajo están estos dos taxis para elegir: por un lado un robusto, confiable, cómodo y siempre venerado Ford Lincoln.... y al lado una Lamborghini Muercielago (ni hacen falta los calificativos).
Elegí un Taxi, tenés un segudo.
Mmm... creo que de pronto hasta te olvidaste de tu esposa y los mellizos, no?
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